Empecé sonriendo y terminé llorando.

Soy partidaria de que las cosas que me pasan a mi son culpa mía. Pienso que por mucho que hagan o digan los demás yo tengo lo que yo consigo, sea malo o sea bueno.

Últimamente estoy averiguando, probablemente demasiado deprisa, lo que es levantarme sin ningún propósito y acostarme tarde, pensando exactamente lo mismo que cuando me levanté; nada. Mi vida normalmente es monótona, no me quejo de eso, como ya escribí antes, es sólo culpa mía, me levanto tarde, me pongo a ver alguna serie, como cualquier chorrada, y me tiro toda la tarde yendo a por guarrerías a la cocina mientras sigo viendo la seria hasta que llega la hora cenar, ceno y sigo viendo series hasta que mis ojos deciden cerrarse y me acuesto. Os sonará como a niña pequeña y los que saben quien soy y me conocen un poco saben que ser pequeña es mi mayor sueño, es mi utopía, pero en mis sueños es mi realidad; el caso es que tengo un diario desde hace ya ni me acuerdo, y cada noche desde entonces escribo todo lo que me ha hecho pensar en el día; llevo un mes sin abrirlo.

Hoy, 31 de Diciembre de 2013 a las 1:24 de la mañana me ha dado por ponerme a pensar en todo lo que ha pasado este año, sea bueno o sea malo; como por ejemplo el echo de que hayamos formado un pedazo de Clan con la intención de cambiar el mundo para que terminemos todos enfadados con todos y hasta las narices de todos; o que empezase el año con gente a la que consideraba amigos, que vaya a verlos cuando pueda y que no me quieran ni ver, y que lo haya terminado el año en una clase llena de completos desconocidos con los que me toca compartir clase durante 4 años más, espero que se acostumbren pronto a mi retraso; o que empezase el año castaña y termine con una especia rara de mechas californianas porque mi madre no me deja teñirme; empecé el año sin pensar ni vivir por nadie que no fuese yo y lo he acabado igual de sola. Pero hay cosas que nunca seré capaz de cambiar; empecé el año dibujando y lo terminé llenando mi techo con dibujos que sigo haciendo; empecé el año siendo el ser más raro de la clase y lo he acabado siendo el individuo desconocido y extraño de una clase diferente; empecé el año queriendo ser una niña pequeña y lo termino soñando que aún puedo encoger.

Han cambiados muchas cosas y hay otras que siguen intactas, hay cosas que han sido buenas y otras muchas que han sido malas. A mi lo único que no me ha gustado es que empecé el año sonriendo y lo voy a terminar llorando.