No hay nadie más, como Él.

Verle llorar a él, es que se te caiga el mundo, que pienses que todo va mal, que hay cosas que no van a tener arreglo, que no va a ser el mismo de antes, hay cosas que marcan tanto, que una persona deja de ser quien es para ser quien nunca se hubiese esperado que sería, pero él no es así, él se levanta cada día con una sonrisa para los demás con ideas que regalar y con ganas de comerse el mundo, no deja que los demás le vean afectado mal o triste, y cuando alguien le ve así, cuando le veo así, el mundo se desploma, te pesa todo lo que ves, lo que no ves, lo que pensabas, lo que no te dejan pensar, todo es muy relativo, pero verle a él llorar es mi fin del mundo personas.
No se que vais a decir, tampoco me importa mucho, pero para mi él es el ejemplo de persona que todos deberíamos ser, es eso bueno que siempre tuve y hoy he empezado a apreciar, probablemente un poco tarde, pero hay personas por las que merece la pena esperar un poco más.
Ver como una persona que siempre va por el mundo regala sonrisas, de todo tipo y para todo el mundo, son cosas que la mayoría del mundo no entiendes, pero yo creo que hoy he empezado a comprenderlo, esa misma persona que regala sonrisas, hoy me ha deleitado con sus lágrimas, y cada una de ellas tiene más valor que cualquier otra del mundo.
Siempre estuvo ahí cuando yo lo he necesitado y nunca pedí su ayuda, hoy me tocaba a mi esta ahí sin que él me llamara, sin que él me esperara, sin que él supiera que contaba conmigo. Cada segundo que he estado ahí ha sido más valioso que cualquier otro que hubiera vivido en otro lado. No creo que ninguno de los que lo leais entendais nada de lo que pone, pero no por ello no lo escribiré, es mi manera de agradecer las cosas a una de las personas que se que siempre estará ahí incondicionalmente, que no es capaz de enfadarse conmigo al igual que yo no soy capaz de enfadarme con él, aunque nunca hallamos tenido motivos para hacerlo.
Es lo más especial que existe.