Una y otra vez.

Empezar de cero, en otro sitio, con otra gente, como volver a nacer en otra parte diferente de la cuidad, no si os ha pasado hace poco o tenéis miedo de que os pase en breve, pero puedo contaros como me fue a mi.

Ilusión, así es como yo empecé a ver el mundo, me brindé la oportunidad de rodearme de gente completamente diferente, en un mundo distinto en que tal vez no sería muy difícil encajar. Empieza todo con una perfección que a veces la ves demasiado perfecta, cómo si supieses que cuando te das la vuelta, alguien la iba a romper, por desgracia eso sólo tardo un mes en pasar. Sé que no soy la típica persona con la que todo el mundo quiere estar; soy la que siempre es amable y siempre tienes palabras buenas para todo el mundo, a veces esa persona es un poco insoportable y esa persona, era yo. Me comportaba como si me estuviese conociendo a mi otra vez desde el principio, como si no contase nada de lo malo ni lo escasamente bueno que hubiese hecho antes, como si fuese la misma persona pero no me hubiese visto antes, la verdad es que me gustaba como era, me gusta como soy, aunque los demás piensen que siempre actúo y que nunca dejo ver 'esa otra parte que tiene problemas', os diré que esa otra parte 'que no dejo ver' es la que ha formado la parte que veis todo el tiempo, en el fondo es parte de mi y es muy difícil no ser yo misma siempre. Tengo la extraña necesidad de ver a la gente de mi alrededor sonreír siempre o estar siempre feliz, independientemente de como esté yo, aunque la imagen que suelo proyectar no es precisamente triste, suelo comportarme con las personas como me gustaría que las personas se comportasen conmigo, pero eso, pocos van a llegar a saberlo, en el fondo no quiero que lo sepan porque yo se lo he dicho, me haría ilusión que me viesen y se diesen cuenta, al igual que yo veo a la gente e intento hacer sonreír siempre.

Siguiendo con lo de empezar de nuevo, me he dado cuenta que empiece de nuevo las veces que empiece la manera en la que me comporto siempre me va a impedir encajar, he estado en demasiados sitios distintos y he intentado encajar demasiadas veces, y hace ya mucho llegué a la conclusión de que yo no tenía que hacer nada para encajar, tenía que ser como soy, y que la gente a la que eso le gustase era la que iba a estar a mi lado, igual que yo estoy al lado de la gente con la que me gusta estar. Hay personas que llevan desde que eramos muy pequeños juntos, y que hemos vivido muchas cosas y hay situaciones y cosas que me hacen pensar si eso que lleva tanto tiempo en pie va a derrumbarse algún día, os lo contaré si sucede, aunque espero con demasiada desesperación no tener que contároslo nunca.

Hace relativamente poco me hicieron saber que había gente que iba diciendo cosas no agradables de mi, lo extraño de ese suceso era que yo me lo esperaba, al fin y al cabo ya me había pasado muchas veces antes, siempre que conozco a alguien o que alguien me conoce cronometro un poco el tiempo que tarda en cansarse de mi o en ver mi parte extraña y como ya antes mencioné en esta ocasión fue un mes. Ellos se comportaban como siempre, normales, no notas nada, hasta que te fijas en que cuando estas en grupo suelen ignorar lo que digo o hacer como que no me oyen, como que no estoy, aunque la verdad es que en su defensa diré que los comentarios que suelo hacer no suelen ser precisamente inteligentes, pero no se te fijas en esas cosas y es cuando ves que tu ahí lo único que haces es ocupar espacio, estar en medio, molestar.

La primera vez que ésto ocurre llegas a tu casa martirizándote, pensando qué es lo que has hecho mal para no repetirlo la siguiente vez que puedas 'empezar de cero'. Cuando ya te ha pasado tantas veces como a mi, solo puedes hacer una cosa, llegar a tu casa y ver ese suceso como algo normal a lo que te acostumbraste hace ya tiempo, el hecho de que a mi me caiga todo el mundo bien no implica que yo le caiga bien a todo el mundo, es más me estoy planteando que lo raro no es que yo caiga mal a la gente, lo raro es que le caiga bien.

Los que ya me habéis leído antes sabéis que ésto no es una queja, es mi manera de ver el mundo, no lo hago para que penséis 'oh pobrecita' o para que digáis 'oh que fuerte que es' lo hago para que penséis 'pues nunca lo habría visto de ese modo' porque al fin y al cabo, lo que yo escribo es tan solo una mirada más del mundo en el que vives.